SEMOS CHISMOSOS

PALABRA DE CÍCLOPE Imagen cortesía de http://ciberprensa.com/ Si las espaldas vieran, la porción usual de esputos se reduciría ostensiblemente, los chismes ya no serían chismes, tendrían matices claros y las bocas indecentes guardarían mutismo mientras estuviéramos presentes. Y es que nos fascina hablar mal del prójimo, lo hacemos con devoción meridiana y así nos inventamos vida y obra de ella o él, aunque nos simpaticen, y creamos mitos y leyendas negras y rosas. El chisme se basa en entretenimiento perverso, sociales como somos vivimos a plenitud nuestra antropofagia conscientes de que la lengua es más rápida que la luz, y decimos y opinamos sobre otros porque nos preocupa el qué dirán de nosotros. Semos chismosos de natura y nos ocupan las apariencias, el juego de máscaras y antifaces, la reputación debe brillar como el oro y hay que ocultar la doble moral. Y entre sonrisas y murmullos avanzan las maledicencias, difamaciones sistemáticas de zutanita y perenganito, a ella le falta un...